Recupera tu piel y tu glow después de las fiestas
Las fiestas navideñas son maravillosas: cenas, celebraciones, maquillaje glamuroso… y, seamos honestos, un poquito de caos para nuestra piel. Si tienes la piel sensible, seguro que notas los efectos al día siguiente: resequedad, rojeces, alguna que otra irritación, y esa sensación de “necesito un respiro”.
8 de enero de 2025

Tranquila, no estás sola. Eli Monté, fundadora de Mamita Botanical Skincare, nos cuenta cómo devolverle la calma y el glow a nuestra piel sensible después de esta maratón de frío, maquillaje y brindis.
¿Por qué la piel sufre tanto en esta época?
El frío es uno de los grandes culpables: deshidrata la piel, debilita su barrera natural y nos deja con esa tirantez tan molesta. Súmale las largas horas de maquillaje (que bloquea los poros), ingredientes no tan amigables, y la falta de descanso que impide que nuestra piel se regenere correctamente. ¿El resultado? Una piel apagada, enrojecida y en busca de auxilio. Pero, ¡no entres en pánico! Todo tiene solución con una rutina simple y respetuosa que mima tu piel y la ayuda a recuperarse.
Tu rutina rescate para piel sensible post-fiestas
1. Limpieza suave, pero efectiva
Lo primero es empezar con una buena limpieza. Usa un limpiador que respete tu piel, eliminando todo rastro de maquillaje e impurezas sin agredirla. El truco está en usar agua tibia (olvídate del agua caliente o fría) y movimientos suaves.
Eli recomienda evitar productos con alcohol o fragancias fuertes, porque lo último que necesitas es irritar más tu piel.
2. Exfoliación ligera: menos, es más
Sí, la exfoliación es importante, pero con cuidado. Si tu piel ya está algo sensible, elige un exfoliante suave y úsalo solo una vez a la semana. Esto eliminará las células muertas y dejará tu rostro listo para absorber los nutrientes de tus productos.
¿Su tip? Opta por exfoliantes enzimáticos, que son más amables que los físicos.
3. Un tónico que mime tu piel
El tónico no es opcional si quieres calmar y equilibrar tu piel. Busca uno con ingredientes naturales como aloe vera o manzanilla, que refresquen y alivien las rojeces. Es un paso pequeño, pero hará una gran diferencia.
4. Sérum: tu mejor amigo
Aquí entra el héroe del día. Usa un sérum específico para piel sensible con ingredientes como ácido hialurónico (hidrata profundamente) y antioxidantes (calman y regeneran). Este paso no solo repara, también fortalece tu piel para que esté lista para lo que venga.
5. Hidrata, hidrata y… ¿ya te dije hidrata?
La hidratación es clave para devolverle a tu piel su barrera protectora. Aplica una crema rica con ceramidas o manteca de karité que nutra y repare en profundidad. Y si sientes que necesitas un extra, añade unas gotitas de aceite facial antes de la crema.
Un consejo extra (porque te lo mereces):
Sé constante. Mimarte un día está genial, pero lo mejor es que hagas de esta rutina un hábito. Piénsalo como un pequeño ritual de autocuidado. Tu piel no solo lo agradecerá después de las fiestas, ¡también todo el año!